EDITORIALES

Ex Libris

 

Dolia Estévez: 1823-2011 y los embajadores

Álvaro Cepeda Neri

Para Felipe García Murillo

La periodista sonorense críticamente combativa Dolia Estévez, es autora del valioso libro: El embajador. Es una reportera de pies a cabeza, entregada a su oficio con su formación, voluntad y talento que insistentemente busca información. Realiza a carta cabal su faceta de corresponsal, de reportera de noticieros y analista de política exterior. De ascendencia jalisciense, Dolia Estévez lleva casi tres décadas en el trabajo de prensa. Su foto aparece en la solapa de dicho libro con sus datos más relevantes. Y la dedicatoria: “A la memoria de los periodistas que perdieron la vida por hacer su trabajo, en un clima de desprotección y desdén hacia nuestra profesión del gobierno de Felipe Calderón”, me parece buen epitafio para la muerte política del borrachín, panista (esto es como un insulto para el panismo calderonista).

De los nueve embajadores-representantes del presidencialismo estadounidense que hubo de 1977 a 2011, la reportera entrevistó a ocho; pero, a mi juicio de lector, ni falta que hizo. Bastó con Lucey, Nava, Gavin, Negroponte, Jones, Davidow, Garza y Pascual. Los hace contestar a una colección de preguntas incisivas, ya no tan diplomáticamente, pero sí como embajadores que fueron. Tiene un índice onomástico utilísimo. Una selecta bibliografía. Y “la lectura de cientos de cables diplomáticos estadounidenses desclasificados bajo la Ley para la Libertad de Información (FOIA) de Estados Unidos, despertaron mi interés por entrevistar a los ex embajadores y conocer de voz propia sus experiencias”. Ella retrata con sus cuestionamientos a esos enviados de Washington que, ya en la Embajada, tienen poder policiaco (la DEA, y para esto darse a la lectura del libro de J. Jesús Esquivel: La DEA en México; la CIA, el FBI) y un gran poder de espionaje, aunado a sus presiones económicas y desde 1970 su colaboracionismo-intervencionista respecto del narcotráfico.

En la portada del libro viene el transporte de Obama: la “bestia” (lo único que trajo en su visita a nuestro país); y en él, Dolia Estévez, nos pone al tanto de esa historia que, desde el Poinsentt aquel de 1845, culminó con el pro-golpista de Henry Lane Wilson (de aquí derivó la fase: “me vale Wilson”). Las entrevistas son un dar la cara, si bien con maquillaje, de los embajadores. Contiene un prólogo de Lorenzo Meyer y el listado cronológico de los embajadores, de 1823 al 2011.

La observación es que Liébano Sáenz, secretario particular de Zedillo, nunca fue “jefe del gabinete de Zedillo”, como se asienta en la nota 201 (página 181). Tuvo demasiado poder, porque a Zedillo le valía rábano atender asuntos, más dedicado a privatizar y servir a los “gringos”; por eso lo premiaron al concluir su sexenio que salvó a los banqueros con el multimillonario Fobaproa, sin autorización del Congreso, como manda la Constitución. La entrevista a Jeffrey Davidow es interesante, ya que representó a Clinton y Bush y se las vio con Zedillo y Fox. Un libro que ve a México desde Washington y viceversa.

FICHA BIBLIOGRÁFICA:

Autora: Dolia Estévez

Título:   El embajador

Editorial:          Planeta-Temas de hoy.-2013

cepedaneri@prodigy.net.mx

Tintes electorales detrás de iniciativa antiaborto

 

Partidos en Aguascalientes quieren quedar bien con la Iglesia

 

Adriana Franco Rosales, Cimacnoticias

Organizaciones civiles que trabajan en defensa de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres alertaron sobre la posibilidad de que el Congreso de Aguascalientes retome y apruebe la iniciativa para “proteger la vida desde la concepción”, de cara a las próximas elecciones locales. 

De aprobarse la propuesta presentada en enero pasado por el diputado priista José Luis Alférez, presidente de la Comisión de la Familia, que el pasado 27 de mayo fue turnada a la Comisión de Gobierno y Puntos Constitucionales, Aguascalientes se sumaría a los 17 estados del país que entre 2008 y 2010 reformaron sus constituciones locales para criminalizar el derecho al aborto.

En declaraciones a Cimacnoticias, Adriana Jiménez Patlán, coordinadora de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en México (Ddeser), advirtió sobre la intención partidista de aprobar la reforma a la Constitución local con el fin de congraciarse con la jerarquía católica y obtener el voto ciudadano, en su mayoría prácticamente de esa religión. 

La activista recalcó que con ello, además de atentar contra los derechos de las mujeres, se estaría violentando el Estado laico.

El próximo 7 de julio habrá elecciones en el estado para renovar la Legislatura local y los ayuntamientos. 

Actualmente el artículo 2 de la Constitución de Aguascalientes plantea que “todo individuo gozará en el estado de las garantías que otorga la Constitución federal y tendrá los derechos y obligaciones establecidas por las leyes locales”.

En cambio, la iniciativa del PRI propone que tal artículo se modifique para que se garantice que “todo ser humano tiene derecho a la protección jurídica de su vida, desde el momento mismo de la concepción, por ello nadie puede ser privado de ella arbitrariamente”.

En enero pasado Alférez argumentó que la iniciativa responde a una demanda ciudadana en el estado, ya que “93 por ciento de sus habitantes son católicos”. 

GANAR VOTOS

Actualmente, el Congreso de Aguascalientes tiene mayoría priista, ya que de las 27 diputaciones, 14 son del tricolor; 11 de Panal, PAN y PVEM; uno del PRD, y uno del PT. Sólo hay dos diputadas (PRI y PAN), que no están en la comisión a la que se turnó la iniciativa de reforma.

Pese a la mayoría priista, Adriana Jiménez Patlán recordó que el pasado Consejo Político Nacional del tricolor aprobó en sus estatutos y principios que estaría a favor de los derechos de las mujeres, “en lugar de criminalizarlas con acciones como la que impulsó Alférez”, acotó. 

Ante ese panorama, la activista destacó la “ciberprotesta” iniciada a través de la página www.tupuedessalvartuvida.org, para recopilar firmas ciudadanas contra la iniciativa antiaborto. 

Explicó que además de la recolección de firmas, se enviarán a las y los legisladores correos web con los nombres de las personas inconformes a fin de “saturar” sus cuentas institucionales. Hasta el momento ya son más de dos mil adherentes, dijo Jiménez.

Detalló que a la protesta virtual se han sumado ciberactivistas de otros países, además de personas de todo México interesadas en defender el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo.

A la par de esta ciberacción, las organizaciones de la entidad, encabezadas por Redefine Aguascalientes y apoyadas por Ddeser, se manifestaron esta semana ante el Congreso local y se anunciaron más protestas a nivel estatal y nacional, para impedir la aprobación de la contrarreforma.

La Constitución local establece actualmente tres causales para el aborto legal: por violación sexual, imprudencial o culposo, y cuando hay peligro de muerte para la mujer.

En el informe “Omisión e indiferencia, derechos reproductivos en México”, elaborado por el Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), se destaca que de 2007 a 2012 la Procuraduría local no emitió una sola autorización de aborto por violación sexual. 

Además la Secretaría de Salud estatal informó que no tenía registrados abortos por ninguna causal, por lo que se desconoce si es por inexistencia de datos o por negativas a realizar la interrupción del embarazo. 

Lo que sí existen, según investigó GIRE, son datos sobre la consignación de mujeres por el delito de aborto en esa entidad, que en el pasado sexenio ascendió a seis, de las cuales dos fueron sentenciadas.

Veneno Puro

 

Rafael Loret de Mola

*Guerras Floridas

*Investigar: Falla

*Nunca lo ha Usado

Los bardos solían organizar, en la época romántica, “combates” de poesía remilgosa para hacer soñar a las jovencitas y hasta entusiasmar a los caballeros del jurado con el buen uso del lenguaje –algo, por desgracia, cada vez más escaso-, y las modalidades de la mímica que podía llegar a ser, de tan expresiva, hasta subversiva. Siempre he pensado que los fascistas –fíjense en los filmes de Adolfo Hitler y en los ademanes de quienes hoy lo secundan-, fueron y son una suerte de concursantes fracasados en materia de oratoria y recitación; se mueven con tanto énfasis que, sin duda, conmueven a los timoratos y a los débiles de carácter quienes se saben incapaces de dar un paso siquiera hacia el tinglado de la incontenible verborrea de la actualidad. Tendríamos que realizar ya un estudio antropológico, para empezar, de nuestra nutrida clase política. 

Es obvio que alrededor del “Pacto por México”, los jugadores, como los viejos poetas, deben utilizar todas sus armas, desde la mímica hasta el chantaje, para hacerse oír y ser premiados. Por ejemplo, uno de los ya victoriosos ha sido Gustavo Madero Muñoz quien, lejos de vindicar la figura de sus ancestros y de su heroico homónimo, logró su propósito de descabezar al coordinador de los senadores panistas, Ernesto Cordero Arroyo, incondicional de calderón –en minúscula, siempre- lo que es difícil de comprender por cuanto fue marginado de la contienda presidencial por una notoria ausencia de apoyos –no hablo de los extralegales sino simplemente de la participación de una militancia que debió ser afín al entonces primer mandatario y optó por otear hacia otros lados alejados de Los Pinos-, en una victoria pírrica si acaso por la construcción de un partido de oposición capaz de alejarse del pantano del presidencialismo. Ojo con esto: el PRI no ha sido capaz de hacer lo propio... ni siquiera cuando fue oposición y optó por el refugio de los ex mandatarios quienes ahora reclaman su “derecho” a pasar algunas facturas.

Mientras tanto, algunos funcionarios obran con especial torpeza y perjudican el paso del presidente Peña Nieto quien salió bien, bastante bien dadas las circunstancias, de dos visitas de Estado claves, las de los presidentes de Estados Unidos, en mayo, y de China, en junio, con sólo un mes de diferencia. Por ejemplo, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, cuyas funciones lo rebasan, sobre todo porque ha debido asimilar, por los retrasos y desplantes del Legislativo sobre la nueva Ley Orgánica del Ejecutivo, facultades de jefe de policía como cuando la mal recordada Dirección Federal de Seguridad se apropiaba el derecho de censurar, espiar, perseguir y desaparecer a “los incómodos”. En esta ocasión, el profesionalismo y dignidad de Manuel Mondragón y Kalb –tampoco experto de origen en materia policíaca-, cubren los espacios marcados por su jefe, el verdadero, esto es el presidente de la República, pero deja muchos otros vacíos... como la frontera con Guatemala descuidada por el anterior mandatario, “el chaparrito, pelón y de lentes” como le llamó un día Manuel Espino Barrientos en la parte más coyuntural de la campaña presidencial de 2006.

Ahora, Espino busca fundar un nuevo partido, Concertación Mexicana, lo que sería bastante saludable, por cierto, para una derecha hecha trizas por doce años de gobiernos con esta dirección cuyos naufragios nadie se atreve a poner en duda: el primer timonel se presenta ahora como presunto empresario marihuanero y el segundo jamás logró su legitimidad política y con ello dio cauce, en buena medida, a lo que hemos dado en llamar “el sexenio de la violencia”.

Me resultaba por demás curioso la apertura de la izquierda, cada vez con más partidos: PRD, PT, Movimiento Ciudadano y próximamente Morena, cuando otrora el Partido Comunista, con dirigentes de la talla de Heberto Castillo y Arnoldo Martínez Verdugo –recién fallecido-, debió subsistir en la clandestinidad política durante décadas, acaso con el pretexto de los sacudimientos que generó la presencia de León Trosky y su asesinato en México, en plena “guerra sucia” entre la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas –tan admirada por el fundador del PAN, Manuel Gómez Morín, como una de las grandes contradicciones de éste y sus correligionarios iniciales-, y la poderosa Unión Americana que se adjudicó la victoria en la Segunda Guerra Mundial cuando sendas potencias fueron las últimas en participar en la devastadora contienda europea cuyas heridas sanaron más rápido, mucho más, a cuanto hubiera podido calcularse desde la creación de la Organización de las Naciones Unidas, fundada el 24 de octubre de 1945 y apenas con algunas variantes desde entonces, cuya sede neoyorquina ha obligado a varios de los líderes contrarios a los Estados Unidos, Kruschev y Castro entre ellos, a visitar la odiada potencia en sus entrañas mismas. Una paradoja de la civilización.

Esto es: una causa que fue clandestina durante décadas cuenta ahora con un policromado abanico de opciones partidistas, a diferencia de la derecha, incluyendo la ultra, concentrada en un solo partido desde la desaparición del Partido Demócrata Mexicano, el “del gallito colorado”, que llegó a tener algún éxito en las tierras del Bajío, sobre todo en Guanajuato y Jalisco por donde pasaron los antiguos cristeros que terminaron siendo arrasados aunque el gobierno de Plutarco Elías Calles no lograra abatir la fe de los mexicanos ni la presencia de la Iglesia católica. En el duelo de fanatismos exacerbados, sendos bandos perdieron más de lo que ganaron mientras la nación se tiñó con la sangre de los mártires de uno y otro lado. Así ha sido nuestra historia en cada uno de sus dramáticos episodios bélicos.

Ahora, Espino, odiado por calderón, pretende forjar su “Concertación Mexicana” casi con la misma metodología con la que nacieron dos partidos anteriores, el del Centro Democrático, ideado por Manuel Camacho y que no udo sobrevivir a su infancia, y el de Convergencia por la Democracia que dio paso ahora al actual Movimiento Ciudadano para aprovechar el posicionamiento del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que ahora igualmente clama por un registro ante el IFE. Por cierto, es por demás interesante recordar que el PRD pudo llegar rápidamente a las boletas porque el antiguo Partido Socialista Unificado de México (PSUM), encabezado por Heberto Castillo, cedió siglas y asientos dentro del órgano electoral rector al naciente instituto de Cuauhtémoc Cárdenas, en un acto de emocionante lealtad histórica, para dar cauce al PRD. Y ahora, que dos partidos se han radicalizado con Andrés Manuel López Obrador –el del Trabajo y Movimiento Ciudadano, con sus debidos registros ante el IFE-, no le entregan a Morena sus sitios entre los representantes de partidos, ni mucho menos colman los requisitos para integrar como partido a Morena. Es una curiosidad, cuando menos.

Me temo que la confianza en López Obrador no lo es tanta como para cederle todo el timón de mando como éste exige considerando la fuerza de su convocatoria personal. Él mismo alega que de no ser por su figura, la izquierda se hubiera desmembrado... ¿y no está ocurriendo lo mismo precisamente por el radicalismo adoptado por éste y sus caprichos de redención particulares? Tomemos el caso de Cuauhtémoc Cárdenas, tres veces candidato presidencial del PRD: nunca personalizó a su partido y si le buscaron fue porque mantuvo su perfil de ser el de mayor posicionamiento entre los electores, no el más iracundo y radical sino, sencillamente, el de mayor prestigio. Por ello ganó el respeto hasta de sus adversarios... aunque nos gustaría verlo convertido en una especie de comisionado-mediador en la guerra concentrada en Michoacán, su territorio y legado.

Mientras, en el PRI, algunos se aprestan a “defender” las victorias de sus candidatos en julio inminente. Esto es, sin negociación alguna derivada del “Pacto”; lo justo, esto es, voto sobre voto aunque el reparto de dinero por fuera haya sido escandaloso. Nadie se atreve a legislar, en serio, sobre la posibilidad de los financiamientos con dinero sucio, un mal que se arrastra desde la campaña de Ernesto Zedillo Ponce de León, en 1994, coincidente con la del colombiano Ernesto Samper Pizano quien luego de un largo proceso y sin ser detenido, reconoció en varias entrevistas haber recibido dinero proveniente del narcotráfico. A él se le sentenció como “precluido”, que en Colombia significa ni inocente ni culpable. Muy conveniente, claro,

Las guerras floridas, por desgracia, siguen animándose en nuestros días. 

MIRADOR

Alguna vez, el abogado Enrique Mendoza Mejía, fallecido apenas en abril pasado, comentó:

--En México, la lucha diaria es por evitar caer en la cárcel... a pesar de ser inocente.

Defensor de Jorge Díaz Serrano, el sacrificado por Miguel de la Madrid ante sus temores de que pudiera ejercer un liderazgo como contrapeso y encarcelado durante siete años sin recibir sentencia, Mendoza Mejía sabía muy bien a lo que se refería. Cuando alguien cae en desgracia, como ha sucedido últimamente con dos ex gobernadores del PRI, Humberto Moreira Valdés y Andrés Granier Melo, uno de Coahuila y otro de Tabasco, no hay poder alguno que los vindique. Y ello no significa que pongamos las manos al fuego por ellos.

Moreira fue un anticalderonista recalcitrante y a ello, más que a la deuda tan manoseada –que comparte con otras entidades en semejantes proporciones-, le debe su desgracia política; Granier, en cambio, es parte de la revancha del PRD; acaso por ello las “pruebas” de su desfalco aparecieron en sendas cajas de cartón –un modus operandis conocido entre perredistas-, en una propiedad el ex tesorero José Manuel Saiz Pineda, detenido el sábado 8 pasado cuando intentaba cruzar la frontera por Reynosa y con rumbo a la impunidad. 

Lo maduro, en todo caso, es ponderar cuántos de estos casos son productos de las vendettas interpartidistas y cuantos otros son “tapados” –como el caso del ex panista, con pretensiones de reincorporarse, de Aguascalientes, Luis Armando Reynoso Femat, y del panista Emilio González Márquez, acusado por lo mismo...¡desde 2008!- por acuerdos inmorales muy bien remunerados. 

POR LAS ALCOBAS

Guerras y operativos van y vienen. Pero ya nadie quiere hablar de las millonadas invertidas en los búnkers construidos a la vera de Genaro García Luna –mientras este sujeto esté libre será difícil creer en las bienaventuranzas del Pacto por México-, ex secretario de Seguridad Pública. El que está debajo de la Avenida Constituyentes, en el Distrito Federal, impresiona. Por arriba, un parque; por debajo, instalaciones que recuerdan a las de la NASA en Houston. 

Durante una visita, hace dos años, al mentado búnker pregunté al entonces subsecretario, el ingeniero Francisco Niembro González, cuántas veces el presidente había utilizado el pomposo salón subterráneo para tomar decisiones sobre la seguridad:

--Sólo una... cuando lo inauguró.

¿Y Peña? ¿Sabrá que cuenta con él?

**De las dirigencias partidistas depende, en gran medida, el curso de México, no sólo el político. Pese a ello, observamos demasiada mediocridad entre quienes desempeñan tales liderazgos fortuitos. Ninguno parece tener tamaños para enfrentar los desafíos de una democracia plural en la que no sea factible, como arma de chantaje, poner en riesgo la gobernabilidad del país. Esto es lo importante. Lo demás, sobra.

email: loretdemola.rafael@yaho.com